- ¿Un día de la semana?
- El jueves- Un número
- El 9- Un color
- El rojo- Un recuerdo
- El mar- Un olor
- El olor del pelo- Un músculo
- El biceps braquial- ¿El biceps branquial?
- Braquial, he dicho el biceps braquial- Aún así... en fin, ¿un gesto?
- Una media sonrisa- Un animal
- La ballena azul- ¿Un helado?
- Pistacho- Un juego
- El ajedrez- Una hora
- Las 5 de la mañana- Un cuento
- Barba Azul- Un refrán
- El tiempo pone a cada uno en su lugar- ¿Un coche?
- Un descapotable- ¿Un descapotable? ¿Dónde vas con un descapotable?
- ¿Y dónde vas tú con tantas preguntas?- A ningún sitio
Esa misma tarde, bastante después de la ronda de preguntas, el niño encuentra una hoja pegada en una ventana. Se acerca para tirarla pero una vez entre sus manos empieza a leer:
"Nueve años después aún recuerdo aquel jueves, cuando el mar se volvió rojo en aquel atardecer. Al cerrar los ojos aún percibo el olor de tu pelo, camomila. Te gustaba estudiar en la playa. Yo te acompañaba cada vez que podía, biceps braquial era lo que tocaba aquella tarde. Me miraste con tus ojos color pistacho mientras me dedicabas una media sonrisa, tu media sonrisa. Recuerdo que hice alguna broma con una ballena azul que te recordó a aquellas historias de piratas que solías leer. Me imaginabas como Barba Azul blandiendo mi espada de madera contra todo aquel que se atreviese a desafiar mis órdenes. Con una jarra de grog en la mano y un loro parlanchín en el hombro izquierdo. No dijiste nada de un parche en el ojo pero supongo que fue porque por aquel entonces todavía utilizaba gafas. Dejabas volar tu imaginación con cualquier cosa, por lo que tenía que recordarte que volvieras a estudiar, mientras yo me centraba en el momento, en perderme, en encontrarme, en encontrarte. A veces jugaba solo al ajedrez, siempre decías que aquello era muy complicado, como el mundo, como tú, como yo. Entonces era cuando oscurecía y te llevaba a casa. Aquel día te subiste en mi viejo R5 y me hiciste bajar todas las ventanillas. Cuando el aire revolvió tu pelo me dijiste que si alguna vez te subías a un descapotable pasarías de peinarte. Aquella noche se nos hizo tarde. Te fuiste cuando en mi reloj daban las 5 de la mañana. ¿Qué pasó después? La vida se complicó, se nos complicó. Nueve años después aquí estoy. No te busco, solo que hoy tu recuerdo vino a verme. El tiempo pone a cada uno en su lugar y mi lugar está aquí y el tuyo a saber dónde. Los recuerdos ya no me duelen, solo me hacen compañía en días como hoy y ¿sabes qué? Me encantó conocerte."